El grupaje de mercancías aparece en la ecuación logística con dos claros objetivos: reducir los costes de envío, rentabilizando y optimizando a la par el espacio de carga. Se trata de un sistema común en cualquier modalidad de transporte, desde la carretera hasta los mares, aplicable a cualquier tipo de mercancía.
Mediante esta solución, las mercancías de diversos clientes comparten el sistema de envío con otros bienes de otros destinatarios, ya sean particulares o empresas. Se trata, por tanto, de una forma de hacer más eficientes las opciones de envío.
Paralelamente, el grupaje de mercancías sigue ganando peso en el sector al suponer una respuesta al desafío de los ajustados márgenes económicos. Además, abre una vía a la sostenibilidad logística ya que, al movilizar todos los bienes en una misma entrega, reduce las emisiones y minimiza el uso de los embalajes.
Esencialmente, el grupaje de mercancías implica la suma de varios envíos de diferentes exportadores en un punto de origen. Estos, a su vez, están destinados a varios clientes o importadores en un punto de destino.
Al llegar, la mercancía agrupada se vuelve a dividir, redirigiendo cada pedido al usuario final.
El transitario desempeña una función fundamental, pues es el punto de encuentro entre los distintos remitentes: el responsable del montaje del envío, el que combina la mercancía y el responsable de los daños.
La actividad, con un fuerte protagonismo en las modalidades marítima y ferroviaria, es realizada habitualmente por transportistas especializados. Este es el caso de Soapa, que cuenta con una división centrada en el grupaje por carretera a temperatura controlada.
Es muy importante combinar las mercancías correctamente, según el grado de peligro, para evitar combinaciones incorrectas como, por ejemplo, alimentos y mercancías peligrosas.
Los términos y condiciones de entrega se establecen en el llamado contrato de envío.
La ventaja más importante y evidente de este tipo de sistemas es que permite minimizar las rutas de transporte y los costes, tanto para los posibles vendedores como para los compradores.
En esta línea, los proveedores no necesitan alquilar un medio de transporte completo, ni esperar a recibir suficientes pedidos, para realizar el envío.
Entre las ventajas del grupaje se encuentran:
El grupaje de mercancías es, por tanto, un eje vertebrador del engranaje mundial de la distribución moderna. El uso de las habilidades de cada modalidad de transporte, así como la optimización de rutas, puede ahorrar costes significativos y minimizar la distancia recorrida.
Sin embargo, las características de este tipo de sistemas hacen necesaria una planificación profesional y sin errores, capaz de garantizar todos los envíos en el momento adecuado y en la cantidad requerida.
En este sentido, a pesar de las múltiples ventajas del grupaje de mercancías, también es importante resaltar sus desventajas respecto a otros sistemas.
En conclusión, a pesar de las desventajas, los beneficios predominan en este sistema. Debido a su rentabilidad, el grupaje es un procedimiento muy utilizado en logística, ya que mezclar los diferentes envíos tiene la ventaja de ser especialmente económico.